El estrés térmico del cannabis hace referencia a los complejos problemas que pueden surgir cuando el cannabis se cultiva en condiciones que son simplemente demasiado calurosas para la bioquímica de la planta.
Las funciones celulares fundamentales se vuelven cada vez más difíciles de llevar a cabo a medida que aumentan las temperaturas. El resultado es que hasta que no se detiene el estrés térmico, la salud de la planta se va deteriorando.
Si el estrés térmico del cannabis no se soluciona rápidamente, el rendimiento y la calidad de la cosecha se verán comprometidos. En el peor de los casos, es posible que la planta no sobreviva.