¿No te agrada el sabor del aceite de CBD independientemente de lo que esté hecho? No eres el/la único/a. Afortunadamente, hay varias formas de sacar el máximo provecho a los productos de CBD sin tener que soportar el sabor herbáceo y terroso que los suele acompañar. Aquí tienes algunos trucos para hacer que tus aceites sean más agradables y apetitosos.
• Ten a mano un vaso de agua para eliminar el sabor del aceite después de que se haya absorbido. Espera un minuto para que el aceite se absorba bajo la lengua, y acaba con el regusto con unos cuantos tragos de agua. Naturalmente, una bebida más sabrosa como el zumo o el café, funcionará igual de bien, o mejor.
• Masticar un caramelo de menta, al mismo tiempo que tomas el aceite o justo después, suaviza parte del sabor natural del aceite. El gusto fuerte de la menta se adueñará del paladar, reduciendo o acabando con el del aceite.
• Cepillarte los dientes después de consumir aceite de CBD no solo los protegerá de posibles manchas, también eliminará el sabor a hierba y lo sustituirá por una sensación fresca y mentolada.
• También puedes probar a tragar el aceite de CBD en vez de consumirlo de forma sublingual. Añadir el aceite de CBD a un batido o zumo de fruta, disimulará su sabor y será mucho más fácil de ingerir. También puedes poner unas gotas en bebidas como el café, la leche e incluso el yogur.
• Para evitar el sabor por completo, no olvides que el CBD también viene en cómodas cápsulas que son inodoras e insípidas. Las cápsulas de aceite de CBD de Royal Queen Seeds están especialmente diseñadas para proporcionar una dosis precisa de aceite de CBD de alta calidad. Simplemente ingiere las cápsulas y sigue con tu vida.